¿Recuerda como se sentía justo antes de que naciera su bebé y durante los ajetreados primeros meses?
Ahora sería un buen momento para pensar en cómo han cambiado sus sentimientos como padre o madre desde entonces.
¿Se siente más seguro(a) de sí mismo(a) y relajado(a) sobre la crianza y educación de su bebé? ¿A veces sigue sintiéndose inseguro(a) y culpable porque siente que no está siendo el padre o la madre perfecto(a)?
No existe un padre o madre perfecto(a). Muchas veces esperamos demasiado de nosotros mismos, pero es imposible ser una persona paciente, comprensiva y afectuosa todo el tiempo. Sólo intentamos hacer lo mejor que podemos.
Sin embargo, muchos padres se sienten culpables y desanimados si no cumplen con sus expectativas en la crianza y educación de sus hijos. Muchas veces tiene unas lista enorme de “deberes” como por ejemplo: “Siempre debo anteponer las necesidades de mi bebé a las mías”, “Siempre debo guardar las cosas del bebé para que la casa se vea limpia y arreglada.” Estos deberes son imposibles de cumplir.
¿Cuáles son algunos de sus deberes? Haga una lista. Trate de completar las siguientes oraciones. Escriba cualquier idea que se le venga a la mente:
- Un buen padre o madre debe:
- Cuando estoy cansado(a) y mi bebé está irritable o de mal genio, yo debo:
- Como padre o madre, yo siempre debo:
¿De quién aprendió sus deberes? Tal vez necesite ponerse a pensar de dónde vienen. ¿Los aprendió de sus propios padres o de sus amigos?
No sea demasiado exigente con usted mismo(a). En lugar de menospreciarse y hacerse sentir mal con su lista de deberes, trate de aceptar sus sentimientos y dése cuenta que no es fácil ser todo para todo el mundo, incluso para pequeños bebés. Recuerde también que nadie es perfecto. Sea un(a) buen(a) amigo(a) con usted mismo(a).
Las vacunas o inmunizaciones protegen a su bebé contra muchas enfermedades graves y son menos peligrosas que lo que serían las enfermedades.
Las vacunas funcionan mejor cuando se aplican en ciertas edades. Cada bebé necesita una serie de vacunas. Si su bebé no ha recibido todas las vacunas, no se preocupe. Puede empezar ahora, sólo llame a su médico o clínica e infórmese de lo que debe hacer y las fechas para hacerlo. Muchas comunidades ofrecen vacunas o inmunizaciones gratis. Revise el calendario de vacunas en su oficina de salud pública.
Los bebés deben recibir una serie de vacunas que pueden ser dadas en cualquier momento entre los 6 y 9 meses de edad. Estas vacunas incluyen hepatitis B, difteria, influenza y polio. Si no está seguro(a) si su bebé necesita otras vacunas ahora, consulte con su médico o clínica
El espejo: un juego con los ojos y las manos
Propósito del juego: Párese con su bebé frente a un espejo y apunte a su reflejo. Diciendo su nombre diga, “Yo veo a Brandon. ¿Donde está Brandon?” Aliéntelo(a) a que se apunte a sí mismo(a) con el dedo en el espejo.
Siéntese enfrente del espejo y haga lo mismo pero con objetos. Agarre un objeto a la vez y póngalo a lado de la cabeza de su bebé. Diga los nombres de los objetos y describa algo sobre ellos, como “Esta es una pelota y es redonda.”
Luego pregúntele a su bebé, “¿Donde está la pelota?” y estimúlelo(a) a que apunte al objeto en el espejo.
Tal vez a su bebé le guste sentarse frente a un espejo de pared y jugar con sus juguetes.
Su bebé probablemente estará comiendo:
- Leche materna o fórmula infantil cuando tenga hambre: aproximadamente 30 onzas al día.
- Cereal infantil mezclado con leche: varias cucharadas dos veces al día.
- Puré de verduras: 2 a 4 cucharadas diarias (incluyendo verdes y amarillas).
- Puré de frutas: 2 a 4 cucharadas diarias.
Déle a su bebé nuevos alimentos uno a la vez. No lo/la obligue a probar nuevos alimentos. Si a su bebé no le gusta algo, deje de dárselo e inténtelo de nuevo al día siguiente. Tal vez le tome de siete a diez intentos antes de que a su bebé le empiece a gustar algún alimento.
Si su bebé quiere, déjelo(a) sostener su propio biberón o cuchara. También ofrézcale alimentos que pueda agarrar con sus dedos como galletas y cereal para que él/ella mismo(a) los agarre. Tal vez le tome algún tiempo aprender, pero no importa. Su bebé está aprendiendo una habilidad muy importante.
Su bebé se ensuciará mucho cuando empiece a aprender cómo alimentarse él/ella mismo(a). Trate de no preocuparse tanto por la limpieza ahora. Ponga un mantel de plástico grande debajo de la silla de su bebé para facilitarle la limpieza.
Al comprar los alimentos de su bebé revise el sello de seguridad. No compre frascos que tengan el círculo de seguridad hacia arriba. Asegúrese de escuchar un “pop” al abrir el frasco de comida infantil. Esto le avisará que ha roto el sello de calidad y que es seguro darle este alimento a su bebé.
Sirva los alimentos y déle de comer a su bebé de un plato y no directamente del frasco. No regrese la comida que le sobró en el plato al frasco. Puede refrigerar el alimento sobrante en el frasco por dos o tres días. Después de que su bebé empiece a comerse todo un frasco en una sola comida, entonces podrá darle de comer directamente del frasco.
¡No le dé de comer cosas dulces! Los dulces, azúcares, cereales endulzados, postres (incluyendo postres para bebés), bebidas con sabores de frutas y sodas o refrescos no le hacen bien a su bebé. Este tipo de alimentos no se les debe dar a los bebés por que echarán a perder su apetito por los alimentos saludables. Estos alimentos son dañinos para los dientes de su bebé.
No agregue azúcar, endulzante o sal a la comida de su bebé.
¿Ha pensado en quitar el pecho o dejar de amamantar a su bebé? Los expertos en el cuidado y la alimentación de bebés recomiendan que los bebés continúen siendo amamantados hasta que cumplan 1 año de edad. Los expertos opinan que la leche materna es la mejor nutrición que un bebé puede recibir. Así que si usted está amamantando a su bebé, continúe haciéndolo.
Su bebé necesita mucho amor y atención, pero también es importante encontrar tiempo para cuidarse a sí mismo(a) y la relación con su pareja.
Ahora que están convirtiéndose en padres amorosos y responsables y se sienten más seguros sobre la crianza y educación de su bebé, encuentren un tiempo para ustedes. Disfruten de sus pasatiempos, deportes, de la lectura y otras actividades que les den energía y los reconecten el uno con el otro. Unos padres saludables que se toman tiempo para mantenerse saludables, es justo lo que los bebés necesitan.
La piel de los bebés es delicada y se quema con facilidad
Los bebés necesitan aire fresco y luz natural, pero mucho sol puede ser dañino. Investigadores han encontrado que graves quemaduras por el sol durante la niñez pueden resultar en un mayor riesgo de padecer, más adelante en su vida, una de las formas de cáncer en la piel más mortales que se llama melanoma maligno.
Estos son algunos pasos sencillos para ayudarlo(a) a usted y a su bebé a disfrutar del sol de forma segura:
- Antes de los 6 meses, mantenga a su bebé fuera del sol. Después de los 6 meses, cuando vayan a estar bajo el sol póngale siempre a su bebé y póngase usted bloqueador o protector solar con un factor de protección solar de 30 o más alto (SPF). Primero pruebe en un área pequeña de la piel de su bebé para ver si no tiene alguna reacción alérgica al producto antes de ponérselo en todo el cuerpo. Vuelva a aplicar el bloqueador o protector solar cada dos horas.
- Manténgase fuera del sol de las 10 am a las 3 pm, ya que es cuando los rayos del sol están más fuertes.
- Mantenga a su bebé en la sombra. Si va a usar una carreola o cochecito, use la cubierta o techo para el sol.
- Póngale un sombrerito o gorra a su bebé y vístalo(a) con ropa ligera que cubra su cuerpo. Vístase de la misma manera que viste a su bebé. Si usted o su bebé se queman por el sol, ponga toallas frías y mojadas en las quemaduras. Si le da fiebre o le salen ampollas, llame a su médico.